jueves, 26 de diciembre de 2013

Prosigo a la meta

“Prosigo al blanco, al premio de la soberana vocación de Dios en Cristo Jesús” (Filipenses 3.14).

Otro año está a punto de terminar. Esto significa un año menos de vida y un año más para que Jesucristo venga, y sin duda que como muchos estaremos pensando en nuevos planes para el próximo año.

No es malo tener propósitos. Uno de los objetivos más importantes es el que el apóstol Pablo tenía: seguir hacia la meta que se había trazado, seguir a Jesucristo, continuar fiel en la lucha hacia el premio de la vocación a la que Dios le había llamado.

La meta de todo cristiano debe ser continuar en el camino  en  el que Dios lo puso desde el día  que  tuvo un encuentro con Cristo, tomando la cruz y siguiendo las pisadas del Divino Maestro.

No debemos fijar nuestras metas en las cosas terrenales, ya que esas cada día irán de mal en peor, conforme al plan profético de Dios.


La perseverancia en el camino de salvación debe ser la ocupación del creyente en Jesucristo.

Fíjate metas, sí, pero como dice el apóstol Santiago: “Si Dios quisiere y si viviéremos, haremos esto o aquello” (Santiago 4.15).

Amado Lector: “Encomienda a Jehová tu camino, espera en Él y Él hará” (Salmo 37.5).

sábado, 21 de diciembre de 2013

La anunciación profética del nacimiento de Cristo

Dios, por medio de Isaías, le profetizó al pueblo de Israel, el nacimiento de su Hijo Jesucristo unos 800 años antes, presentándolo el profeta como el Mesías, hablando de sus dos naturalezas.

“Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado; y el principado sobre su hombro; y llamarase su nombre Admirable, Consejero, Dios fuerte, Padre eterno, Príncipe de paz” (Isaías 9. 6). De tal manera que no hubo excusa para ellos al rechazarle cuando vino al mundo.

Fue una profecía completa, sin dejar duda para cuando ese niño naciera, al agregar  “Por tanto el mismo Señor os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y parirá un hijo y llamará su nombre Emmanuel” (Isaías 7.14).


San Mateo dice cuando nace Jesús: “Todo esto aconteció para que se cumpliese lo que fue dicho por el Señor, por el profeta que dijo: He aquí que la virgen concebirá y parirá un hijo, y llamarás su nombre Emmanuel, que declarado, es: con nosotros Dios” (Mateo 1. 22,23).

Más adelante el Señor confirma la señal, diciendo “Mas tú, Beth-lehem Efrata, pequeña para ser en los millares de Judá, de ti me saldrá el que será Señor en Israel…” (Miqueas  5. 2).

Amado Lector: Así como el Pueblo de Israel, también nosotros tenemos todas las señales claras para creer en Jesús.

viernes, 1 de noviembre de 2013

¿Dónde están los muertos?

A esta pregunta la Palabra de Dios, contesta: Y el polvo se torne a la tierra como era (hablando del cuerpo) y el espíritu se vuelva a Dios que lo dio” (Ecclesiastés 12.7).

En la primera parte de nuestro texto nos enseña la Palabra de Dios que el cuerpo, el cual se sepulta, se vuelve polvo de donde fue tomado (Génesis 2.7) y el espíritu se va a Dios.

Otra pregunta surge: ¿Todos los espíritus de los que mueren van a Dios? El Señor Jesús narra una parábola conocida como “El rico y Lázaro”, en donde contesta la pregunta diciendo: Y aconteció que murió el mendigo, y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham: y murió también el rico, y fue sepultado. Y en el infierno alzó sus ojos, estando en los tormentos, y vió a Abraham de lejos, y a Lázaro en su seno, (Lucas 16.22,23).

Con esto vemos que no todos los que mueren van a Dios. Unos van al seno de Abraham o el cielo donde está y otros al infierno, lugar de tormento.

Otra pregunta que nos hacemos: ¿En verdad vienen los muertos? En la misma parábola el Señor Jesús, hablando de la súplica que el rico le hace a Abraham para que Lázaro vaya a refrescar su lengua con agua,  le dice: “Y además de todo esto, una grande sima está constituída entre nosotros y vosotros, que los que quisieren pasar de aquí a vosotros, no pueden, ni de allá pasar aca”, (Lucas 16.24-26).
 
Por otra parte el Predicador dice que los que viven saben que han de morir: mas los muertos nada saben, ni tienen ya más parte en este siglo, en todo lo que se hace debajo del sol (Ecclesiastés 9.5,6).
 
 Por lo tanto amado lector: Es mejor ponerse a cuentas con Dios antes de morir.

domingo, 15 de septiembre de 2013

La verdadera libertad

Gracias a Dios por la libertad que, por medio de nuestros héroes, Él nos dio, por lo que gozamos especialmente de libertad religiosa.
 
Pero lo triste es que nuestro querido México no es libre completamente, empezando porque la mayoría de los mexicanos siguen esclavos de la idolatría y la maldad, la droga, el alcoholismo y todo porque no han reconocido que Jesucristo es el único que puede dar libertad completa.
 
San Juan nos lo comprueba, diciendo: “Así que si el Hijo (Jesucristo) os libertare, seréis verdaderamente libres” (Juan 8.36).
 
Mientras  Jesucristo no sea el guiador de la vida de todos los mexicanos, nuestro país seguirá  de  mal  en  peor, ya que no son hijos de Dios sino del diablo (Juan 8.44) todo aquel que es homicida, y mentiroso las obras del diablo hace.
 
Nuestro México vive bajo la esclavitud del diablo, del cual no ha podido ser libre, antes al contrario cada día se hunde más y más en la maldad y en el pecado. Por eso mientras no sea Cristo el que gobierne el corazón de los mexicanos, seguirán siendo esclavos, aunque nuestros héroes nos dieron una parte de la libertad de la cual como ciudadanos gozamos hoy.
 
 
Amado Lector: Cristo es el único que puede dar la verdadera y completa libertad a ti y a todos los que se encuentran esclavizados del pecado.

sábado, 17 de agosto de 2013

La bienaventuranza del perdonado


“Bienaventurado aquel cuyas iniquidades son perdonadas, y borrados sus pecados” (Salmo 32.1).
 
Sin duda que David tenía la experiencia de lo que se siente ser perdonado por Dios; esta felicidad no consiste en la posesión de los bienes de este mundo, sino en la misericordia de Dios, su perdón, su gracia, y sus bendiciones espirituales.
 
Cuando leemos este Salmo, es como si se nos dijera: El perdón del pecado es el fundamento de toda bendición del pecador, pues es el privilegio fundamental del que fluyen todos los demás ingredientes de su verdadera felicidad.

Cuando hay un verdadero arrepentimiento, también la rebelión es perdonada y se cancela su castigo, de forma que ya no pesa sobre el pecador la mano de Dios, es una cobertura del pecado de la misma forma en que se cubre la desnudez, para que no aparezca nuestra vergüenza (Apocalipsis 3.18).
 
Cuando se perdona el pecado, es cubierto  con la justicia de Cristo (2a Corintios 5.21). Esto es no imputarse la iniquidad, no tenerse en cuenta la maldad del pecador; y vive en paz con Dios y con su prójimo.

Amado Lector: Experimenta esta bienaventuranza, arrepintiéndote de todos tus pecados y viniendo a Jesucristo.
 
 

sábado, 22 de junio de 2013

El verbo hecho carne


 
“Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad” (Juan 1.14).
 
Estas palabras nos declaran la encarnación del Hijo de Dios, el cual fue concebido por obra del Espíritu Santo en el vientre de la virgen María, (Lucas 1.35).
 
La naturaleza humana con que el Verbo se cubrió, es un hombre mortal con toda la humillación que la carne débil comporta. En la carta a los Hebreos se nos dice, que así como los hijos participaron de carne y sangre, él también (Hebreos 2.14).
 
El evangelista Juan nos asegura que el mismo Verbo que era Dios, se hizo carne, se sometió voluntariamente a la miseria y necesidades de la naturaleza humana, carne connota también al hombre pecador y aunque Cristo no cometió jamás nada impropio, fue hecho pecado por nosotros ( 2ª Corintios 5.21).

Amado Lector: Todo esto hizo Dios por amor a ti, a mí y por todos los pecadores, para darnos salvación y vida eterna.
 

lunes, 6 de mayo de 2013

6 pasos para reparar tu matrimonio

1. Decide vivir para siempre con tu cónyuge

Mateo 19.6: "Así que no son ya más dos, sino una sola carne; por tanto, lo que Dios juntó no lo separe el hombre".
 
Sin divorcio. Sin amantes. Sin nada. El divorcio no es una opción. El divorcio debe ser una palabra inexistente en tu relación. Los matrimonios no duran porque las personas se casan con la idea de que si no funciona se pueden divorciar, y de esa manera no invierten en la mejora del matrimonio.
 
Entiende que tú asumiste un compromiso ante Dios. Tu cónyuge merece una atención exclusiva. Dedícale tu esfuerzo, tu atención, tu amor, tu tiempo y todo lo que sea necesario.
 
 
2. Decide hacer de esta relación la mejor de tu vida

Romanos 12.2: "No os conforméis a este mundo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál es la voluntad de Dios, agradable y perfecta".
 
Cambia tu manera de pensar. Reprográmate. No permitas que los matrimonios que fallan dicten el futuro del tuyo. Decide no ser como la mayoría.
 
Invierte en tu matrimonio lo que sea necesario: libros, seminarios, etc. Decide ser un mejor cónyuge. Amar es una decisión... es un mando de Dios, pero también es tu decisión.
 
 
3. Demuestra el amor en la práctica

Efesios 5.28: "Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama".

Haga lo mismo que cuando eran novios. Amar es dar, dar, dar. Para recibir, primero es necesario dar.

Invierta en acciones que demuestren afecto e interés: las palabras de cariño, declaraciones, caricias, besos, tiempo de calidad. Trate a su cónyuge con honor, con amor, con dignidad.

1 Pedro 3.7: "Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo".


4. Practica el perdón divino

Mateo 7:3 "¿Porqué miras la paja que está en el ojo de tu hermano y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo?".

No esperes que tu cónyuge sea perfecto. Jesús nos amó cuando nosotros éramos pecadores.

No guardes amargura. No te duermas sin perdonar. El perdón nos permite vivir sin rencor, sin construir paredes de resentimiento.

Perdonando, tú no esperarás que tu cónyuge sea perfecto, sino que lo amarás tal y como es, aceptando sus fallas. Permítele a Dios hacer los cambios necesarios en él.


5. Cree que Dios tiene un plan para tu vida y la de tu cónyuge

Jeremías 1:5 "Antes que te formara en el vientre te conocí, y antes que nacieras te santifiqué, te di por profeta a las naciones".

Dios conoció a tu cónyuge mucho antes que tú. Dios ama a tu marido. Dios ama a tu mujer. Si tu cónyuge es tan importante para Dios, ¿porqué no lo es para ti?
 
Aprende a verlo como Dios lo ve.  


6. Disfruten el uno del otro

Cuando las barreras de las falsas expectativas desaparecen, cuando se esfuercen por mejorar su relación, cuando se acepten tal y como son, como Dios los hizo, solo queda una cosa por hacer...
 
¡Disfruta a la mujer de tu juventud! Proverbios 5.18: "Sea bendito tu manantial y alégrate con la mujer de tu juventud".
 
¡Disfruta al hombre de tu juventud! Cantares 1.16: "¡Qué hermoso eres, amado mío, qué dulce eres! Frondoso es nuestro lecho".
 

sábado, 4 de mayo de 2013

La intercesión de Cristo

El escritor sagrado de la carta a los Hebreos, hablando del sacerdocio de Cristo, dice: “Por lo cual puede también salvar eternamente a los que por él  se allegan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos” (Hebreos 7.25).
 
Después de que Cristo se manifestara a sus discípulos por cuarenta días, ascendió a los cielos. Dice la Escritura Sagrada que estaban en el Monte de las Olivas, cuando de pronto fue alzado en una nube y le quitó de en medio de ellos; el escritor de la carta a los Hebreos dice que está sentado a la diestra de Dios (Hebreos 10.12).

En el libro de los Hechos, dice el Apóstol Pedro en su mensaje expuesto después que curó a un cojo, “Al cual de cierto es menester que el cielo tenga hasta los tiempos de la restauración de todas las cosas, que habló Dios por boca de sus santos profetas que han sido desde el siglo” (Hechos 3.21).

El Apóstol Juan dice: “Hijitos míos, estas cosas os escribo, para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo” (1ª Juan 2.1).
 
Apreciable Lector: Nuestro Señor Jesucristo está a la diestra de Dios, intercediendo no solamente por los que ya se han arrepentido de sus pecados y le han aceptado como su Salvador, sino también está para interceder por aquellos que no lo han hecho; él espera que lo hagan; como en este caso tú si aún no te has arrepentido.

sábado, 30 de marzo de 2013

La victoria del creyente

“Mas a Dios gracias, que nos da la victoria por el Señor nuestro Jesucristo” (1ª Corintios 15.57).

La victoria del creyente en Jesucristo es una gracia divina, que se aplica a todo aquel que cree en la muerte y resurrección de Jesucristo, arrepintiéndose de todos sus pecados.
 
Dios, quien hizo el plan de salvación desde antes de la fundación del mundo (Efesios 1.4), levantó a su Hijo de los muertos (Romanos 8.11) para sentarlo a su diestra en los cielos donde intercede eternamente (Hebreos  7. 25).

La victoria que Jesús obtuvo en la cruz se manifestó en su resurrección, venciendo así al pecado y a la muerte, para que todo aquel que en él cree, no se pierda mas tenga vida eterna (Juan 3.16). Por eso la resurrección de Jesucristo es la victoria de todo creyente sobre el pecado y sobre la muerte, pues quienes dejan este mundo habiéndose arrepentido de todos sus pecados y aceptado a Cristo como su Salvador, no están muertos, duermen, dice San Pablo (1ª Tesalonicenses 4.13-14).

Amado Lector: La resurrección de Jesucristo es la victoria de su obra redentora, para ofrecerla a todo pecador que se arrepiente y le acepta como su Salvador

sábado, 23 de marzo de 2013

Semana Santa 2013

La última semana que Jesús estuvo en la tierra en forma humana fue llena de momentos memorables, profecías cumplidas, oración íntima, discusión profunda, actos simbólicos y eventos que cambiaron el mundo.

Te invitamos a revivir la historia narrada en los evangelios, siguiendo nuestro plan especial de lectura bíblica durante la Semana Santa. También esperamos contar con tu presencia en nuestros cultos especiales:



Jueves 28, a las 6:00 p.m.
CULTO DE SANTA COMUNIÓN
“Jesús descubre la traición de Judas”

Viernes 29, a las 3:00 p.m.
CULTO DEL SERMÓN DE LAS SIETE PALABRAS
“El Mensaje de la Cruz”

Domingo 31, a las 6:00 a.m.
CULTO ESPECIAL DE RESURRECCIÓN
"La Victoria de Jesús sobre la muerte”

¡TE ESPERAMOS!

jueves, 21 de marzo de 2013

Rescatados con sangre

 “Sabiendo que habéis sido rescatados de vuestra vana conversación, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata; sino con la sangre preciosa de Cristo, como un cordero sin mancha y sin contaminación” (1ª Pedro 1.18,19).
El rescate del que el Apóstol habla es el que Dios hace de los pecadores, que van en camino seguro a una muerte eterna y que no pueden volver atrás, es decir, que no puede hacer nada por ellos mismos.
 
Por eso Pablo el Apóstol dice, hablando de la salvación que recibimos cuando estábamos muertos en nuestros delitos y pecados (Efesios 2.1), es decir, que estando perdidos en la maldad, Dios nos rescata dándonos salvación eterna.

El rescate del que los pecadores arrepentidos han sido objeto, no se ha comprado ni conseguido con cosas materiales como oro o plata, porque  ese rescate no se cubriría ni con el dinero de todo el mundo, pues Jesús, dice: ¿Qué recompensa dará el hombre por su alma? (Mateo 16.26).
 
No hay nada en este mundo que pueda cubrir el valor del rescate de los pecadores.
 
El rescate que es válido y surge efecto, es el que Jesucristo con su muerte y derramamiento de sangre llevó a cabo en la cruz del calvario, una sangre como de un cordero sin mancha y contaminación. Un rescate que costó sangre.


sábado, 2 de marzo de 2013

Cristo, el único camino a Dios


 
“Jesús le dice: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mi” (Juan 14.6).

Existirán muchas religiones, sectas y denominaciones en el mundo, pero ninguna de ellas te lleva a Dios.

Hablarán de Dios, de Jesús y de un sinfín de enseñanzas que sin duda sacan de la Biblia o de sus biblias impresas por ellas, pero solo contienen mensajes  adulterados o acomodados a sus propios deseos o fines, pero no presentan el camino verdadero a Dios.

La palabra religión viene de la raíz griega “Religuere”, que significa “Volver a ligar” o “volver a unir”.

Dios tiene el propósito de que el hombre vuelva a él, formuló el plan conocido de salvación, según San Pablo en su carta a los Efesios, con el propósito de ofrecerle a los pecadores el perdón de todos sus pecados. Por eso San Pedro en el Sanedrín dijo: “Y en ningún otro hay salud; porque no hay otro nombre debajo del cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos” (Hechos 4.12).
 
Amado Lector: Cristo es el centro de la predicación del evangelio, no hay más, él es el único que puede no sólo llevarle a Dios, sino concederle el perdón de sus pecados y darle vida eterna e interceder para siempre delante del trono celestial (Hebreos  7.25).

viernes, 15 de febrero de 2013

La invitación de Jesús


“Venid a mi todos los que estáis trabajados y cargados, que yo os haré descansar” (Mateo 11.28).
 
Qué oportuna se hace hoy la invitación de nuestro Salvador, ya que no es solo para aquellos que no le han buscado o aceptado como su Salvador, sino también para los que son sus hijos; qué mejor oportunidad el ofrecernos una vez más su apoyo y refugio, ya que desde el Antiguo Testamento él nos dice: “El que habita al abrigo del altísimo, morará bajo la sombra del Omnipotente” (Salmo 91.1).
 
Y el Salmista nos invita también, diciendo: “Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará…” (Salmo 55.22).

Esta invitación del Señor es para aquellos que  sienten  la carga de sus pecados y de la vida mundana, cansados de la mala vida que llevan y no la pueden dejar, que con todo el anhelo de su corazón desean un cambio de su manera de vivir y que no puede lograrlo porque se encuentran presos del pecado.  
La invitación del Señor Jesús es para aquellos que quieran hacerse sus alumnos y encuentren descanso para su alma, sentándose a los pies del Hijo de Dios y escuchar sus palabras de vida eterna.
 
Amado Lector: Solo tienes que decidirte a seguir al Hijo de Dios y hacerte uno más de sus alumnos, siguiendo sus pisadas y practicando su ejemplo.

sábado, 9 de febrero de 2013

Arrepentíos


Y Pedro les dice: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo” (Hechos 2. 38).

Cuando Pedro terminó el mensaje de Pentecostés, muchos fueron redargüidos  y  reconocieron su situación, interesándose en poner solución a su maldad. Por eso preguntaron ¿qué haremos?
 
El paso importante que toda persona debe dar es de ARREPENTIMIENTO. No se trata de integrarse a una iglesia solamente, ni bautizarse sin dar este paso. Nuestro Señor Jesucristo comenzó su predicación con el llamamiento al arrepentimiento (Mateo 4.17) para poder entrar al reino de los cielos.
 
Una vez arrepentido viene la confesión pública por medio del bautismo, reconociendo a Jesucristo como único Salvador; recibiendo así con toda certeza el perdón de los pecados y de inmediato recibir al Espíritu Santo como un don celestial (Efesios 1.13).

Amado Lector: El arrepentimiento verdadero consiste en abandonar su vida de pecado, cambiar de rumbo en la vida y volverse a Dios, trayendo a los pies de Jesucristo, todos tus pecados, para que recibas por medio de su sangre el perdón de todos ellos (Isaías 55.7).

viernes, 1 de febrero de 2013

Cristo, nuestro ejemplo

Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis” (Juan 13.15).

Cristo enseñó sobre la obediencia, la humildad, el amor y el servicio a los demás, no solo con palabras, sino con hechos.  

Él vino al mundo como el Hijo de Dios a buscar y a salvar todo lo que se había perdido (Lucas 19.10), en obediencia al pacto que había hecho con su Padre. Él no vino para ser servido, sino para servir, y dar su vida en rescate por muchos (Marcos 10. 45).

Una de las cosas que tuvo nuestro Señor fue su humildad, “pues siendo en forma de Dios, no tuvo por usurpación ser igual a Dios” (Filipenses 2.6).

Siendo Creador, sustentador y dueño del universo, él no tuvo un lugar donde reclinar su cabeza; nunca dijo “voy a mi casa” o “esto es mío”.

Como Hijo de Dios tuvo poder, poder que usó para sanar a los enfermos, echar fuera demonios y ayudar a los necesitados; poder que utilizó para servir a los demás, fue llevado a la cruz, donde murió y resucitó para dar vida a los que por causa del pecado estaban condenados a muerte eterna.

Amado Lector: Cristo es el único ejemplo, para seguir sus pisadas y poner nuestros ojos en él, como el único camino hacia Dios.

sábado, 26 de enero de 2013

Caminos diferentes


Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella. Porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan” (Mateo 7.13-14).

En este versículo  el Señor claramente nos habla de dos destinos diferentes del ser humano. El primero es el que se entra por la puerta ancha, la cual lleva a un camino espacioso y que por lo mismo muchos entran por ella, pues en ellos no hay reglas ni disciplina que restrinjan el caminar del hombre, pero que conducen a la perdición. El proverbista, dice: "Hay camino que al hombre parece derecho; empero su fin son caminos de muerte” (Proverbios 14.12).

El segundo es el tiene su puerta estrecha, en donde solo entran uno por uno y su camino es angosto, de tal manera que su andar es derecho y por lo mismo son pocos los que entran y transitan por él.


En este camino hay reglas y disciplina y por lo mismo no a cualquiera le gusta, pues esta puerta y este camino es Jesús, quien dijo: “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida: Nadie viene al Padre, sino por mi”, (Juan 14.6). Éste camino es el que lleva a Dios; “Yo soy la puerta: el que por mi entraré, será salvo…”, (Juan 10.9), es la puerta de salvación.

 
Amado Lector: ¿por cuál camino transitas en este mundo?

martes, 15 de enero de 2013

La perseverancia del cristiano


"Prosigo al blanco al  premio de la soberana vocación de Dios en Cristo Jesús (Filipenses  3.14 ).

San Pablo, de quien podía decirse que lo tenía todo en cuanto a su vida cristiana, nos dice que él consideraba que no había logrado su perfección en esta vida, por lo que continuaba perseverando en este mundo mientras Dios le diera vida. El propósito de su vida era seguir adelante, con la misma meta, puestos sus ojos en el blanco eterno, que era Cristo Jesús.

La perseverancia del cristiano debe ser en perseguir a Cristo, para identificarse cada día con él; esto significa ir muriendo cada día al pecado y viviendo únicamente para servir al Señor. El mismo Señor Jesús dice: Si alguno quiere venir en pos de mi, niéguese a sí mismo, y tome su cruz y sígame (Mateo 16. 24).
 
Procuramos obtener en esta vida las cosas necesarias para vivir mientras estamos en este mundo, pero nuestro principal propósito debe ser el seguir las pisadas de Jesucristo, ya que él es el único camino para llegar a Dios.

Estimado lector y hermano: Está bien tener propósitos en esta vida y hacernos proyectos en este nuevo año, pero todo sin perder de vista al premio de la soberana vocación que es en Cristo Jesús, el único medio por el cual podremos llegar a Dios al final de nuestra asignación temporal.

miércoles, 9 de enero de 2013

Mirando hacia arriba


Es muy natural que todos, al comenzar un nuevo año, tengamos propósitos y buenos deseos para que nos salgan las cosas bien, pensando en buena salud y éxito en el trabajo. 

Sin embargo, muchos de estos propósitos y deseos  no dependen únicamente del esfuerzo que el hombre haga para lograrlos, ni del apoyo y buena estabilidad de nuestro país, sino de Dios que hace el querer como el hacer de su buena voluntad (Filipenses 2. 13). 

Por eso San Pablo nos invita a esperar y confiar en las promesas de nuestro Señor Jesucristo, poniendo nuestros planes en las manos del Todopoderoso,  quien  determina todo lo que en este mundo sucede; pero más bien en las cosas  celestiales que son las que perduran eternamente y que son las promesas que todos los creyentes abrazamos en nuestro corazón.

Por otra parte, el mirar hacia arriba nos habla de que allá es donde está la verdadera vida, sin engaños ni fracasos, y que en esta tierra solo vamos de paso, teniendo una asignación temporal, de la cual nadie puede pasar (Job 14. 5).
 
Amado Lector: Quien pone su mirada en donde Cristo está, será bien dirigido en esta vida y todo lo que haga prosperará (Salmo 1.3).

martes, 1 de enero de 2013

La esperanza del creyente


Encomienda a Jehová tu camino, y espera en él y él hará(Salmo 37. 5).

Al comenzar un nuevo año, tenemos muchas expectativas, proyectos, propósitos y buenos deseos, pero es importante tomar en cuenta lo que la Palabra de Dios nos dice:

"Ea ahora, los  que decís: Hoy y mañana iremos a tal ciudad, y estaremos allá un año, y compraremos mercadería, y ganaremos: Y no sabéis lo que será mañana. Porque ¿qué es vuestra vida? Ciertamente es un vapor que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece. En lugar de lo cual deberías decir: Si el Señor quisiere y si viviéremos, haremos esto o aquello” (Santiago 4. 13-15).

El Salmista confirma esta enseñanza, llevándonos a esperar y confiar en Dios, poniendo todos nuestros propósitos y planes en las manos del Señor, primero encomendando nuestro camino al que todo lo sabe y puede: Dios. Segundo, esperar no lo que yo quiero, sino lo que Él como mi Creador tiene para mi bien, y termina diciendo: ÉL HARÁ.

Amado Lector y hermano: Dejemos que sea Dios el que trace nuestros proyectos, él es el que tiene todo para que las cosas sean no como las queremos, sino para nuestro bien (Romanos 8. 28).